¿Te imaginas un río domado por la piedra? ¿Te imaginas visitar un remanso natural a los pies de un viejo castillo árabe? Pues no tienes que imaginar, ese lugar existe y se llama el Charco Azul, un paraje natural donde el río Túria se convierte en un pequeño lago, cuya superficie parece un espejo, atrapado entre altas paredes de piedra caliza a los pies del municipio de Chulilla y de su precioso castillo árabe. Allí, donde en otro tiempo el río era bravo y peligroso, se encuentra ahora este pequeño remanso de paz.
Chulilla es uno de esos pequeños pueblos que parecen salidos de una película, se apiña como antaño bajo el cerro del Castillo, justo por encima de un foso natural que atrapa al río Túria entre paredes de piedra caliza de más de 160 metros de altura. Por su forma natural, este paraje se ha convertido en un verdadero santuario para los que practican la escalada en nuestro país, con más de 500 pistas diferentes.
Podemos llegar a este maravilloso paraje siguiendo la CV 35 desde Burjassot, hasta Losa del Obispo donde nos desviaremos por la CV 394 hasta llegar a Chulilla. Una vez en el pueblo, con solo caminar una media hora, nos encontraremos al pie de los enormes paredones de piedra, justo frente al Charco Azul, un lago de agua cristalina que refleja la belleza del paisaje de roca.
La ruta del Charco Azul es ideal para recorrer con los niños ya que está completamente señalizada y es muy sencilla de seguir, empieza y termina en la plaza de la Baronía de la localidad y recorre los entornos que años atrás recorrieron los madereros y los trabajadores del pantano cercano. Esta es una de las nueve rutas autoguiadas que recorren este paraje natural.
Aunque si te gustan las emociones fuertes, no te puedes perder la ruta de los «pantaneros», otra de las rutas que recorren la parta alta del Túria. Esta ruta, que sigue los pasos de los obreros de los años 50 que trabajaron en la presa de Loriguilla y con la que recorreremos los altos acantilados que bordean el río, tiene el espectacular añadido de hacernos cruzar por dos veces sobre el río, atravesando dos puentes colgantes.
Visitar el Charco Azul y descubrir Chulilla será toda una experiencia, esta zona de Valencia conocida como Los Serranos guarda un enorme patrimonio natural, si te gusta la escalada disfrutarás de sus pistas y si te gusta la naturaleza amarás sus parajes frondosos y rocosos. Y si eres un enamorado de la gastronomía, en esta zona podrás disfrutar de la famosa «Olla Churra» un exquisito plato típico de la región a base de alubias blancas, patata y cerdo.
El Charco Azul será un lugar maravilloso del que disfrutar a tu manera, sin prisas ni agobios de ningún tipo, para eso lo mejor es que alquiles una autocaravana en Autocaravanas Europa y que dejes las preocupaciones en casa.